"Querida, nunca entendí para qué servían los castillos... hasta que nos volvimos todos tan demócratas".

martes, 7 de diciembre de 2010

EL CONDE DE PALADÍN


Monsieur le Compte.

Wilbur Porridge dijo...

Señor, el valet del señor conde de Paladin me ha dejado este mensaje para usted:

Eugène:

Te ruego que me retornes, a la mayor brevedad posible, la espada que te presté para nuestro duelo. Debo devolver ambas armas antes de esta noche a Covent Garden, donde las necesitan para la representación de
Don Giovanni. Te ruego encarecidamente que, en futuras ocasiones moderes la exuberancia de tus floreos. Es innegable que el espectáculo que ofreces es vistoso, y que tu prometida habrá quedado favorablemente impresionada. Pero, a pesar de que la punta de estas armas de atrezzo es retráctil, puedes acabar sacando un ojo a alguien. Te recuerdo también que esta noche tenemos partida de cartas en casa de Lord Corduroy.

Afectuosamente.

Antoine
.

lunes, 6 de diciembre de 2010

Louella Parsons dijo...

Mi querido SANS-FOY,

Sabes que había decidido odiarte por toda la eternidad por tu odioso compromiso con lady Bo pero siempre te empeñas obstinadamente en ablandar mi frágil corazón con cualquier ocurrencia inesperada.
Tu valentía al aceptar el reto del conde Antoine de Paladin anoche en el Casino me emocionó, querido Eugène.
La habilidad del conde jugando al ècartè es legendaria y tú, mi querido Eugène, aceptaste el reto como un audaz caballero y te batiste como si estuvieras en la batalla de Agincourt.

Celebro que tu atolondramiento actual no haya convertido tu cerebro en una coliflor. Las esperanzas de que vuelvas a la vida de las personas normales han renacido en Parsons Manor y McGrog lo ha celebrado sirviendo el porridge con miel escocesa.

12:35 PM

__________

Monsieur de SansFoy dijo...

LOU, my dear:

Me complace informarte de que, en efecto: mi honor está completamente a salvo.
La partida de èncartè con Monsieur le Comte resultó una experiencia breve pero fulgurante, como la vida sexual de los conejos.
(No sé qué diantres le pasa hoy a mis metáforas. Ayer debí de quemar demasiada energía cerebral)

Fue como bailar un foxtrot con una chica demasiado joven sobre una pista untada de aceite: ¡rápido, rápido!
(Decididamente, es mejor que deje las metáforas por hoy)

En cualquier caso, la experiencia resultó de lo más enriquecedora (para el Conde)
By the way... ¿Podrías prestarme veinte libras hasta el viernes?

Ciao, dear.
Sé amable y manda a Rose con la pasta y un bote o dos de tu deliciosa compota... y te perdonaré lo de la rana en la sopa.
Eugène
8:03 PM